Llega el verano. El buen tiempo, la luz, el calor... y los aires acondicionados. Yo tengo en mi casa, pero procuro usarlo poco. En realidad, muy poco, unos cuantos días al año. Sin embargo, paseo por la calle y veo, siento, las corrientes de aire frío que se escapan de los comercios, refrigerados permenentemente y con las puertas abiertas para atraer a la clientela. Tal vez ellos puedan pagar la factura (en realidad, los consumidores finales son quienes la pagan), pero el planeta no puede.
En las casas, la gente deja las luces encendidas, incluso sabiendo que están en estancias a las que no acudirán durante horas, incluso cuando hay sufieciente luz ambiental.
Al menos, leo que el gobierno cambiará las tasas que cobra a los coches nuevos, cargando más a los que sean más contaminantes. Un paso, insuficiente, en la dirección adecuada.
En las casas, la gente deja las luces encendidas, incluso sabiendo que están en estancias a las que no acudirán durante horas, incluso cuando hay sufieciente luz ambiental.
Al menos, leo que el gobierno cambiará las tasas que cobra a los coches nuevos, cargando más a los que sean más contaminantes. Un paso, insuficiente, en la dirección adecuada.
1 comentario:
Propongo algo un tanto distinto. En vez de cobrar más por los coches contaminantes, ¿por qué no baja el IVA de los coches más ecológicos (i.e. híbridos)?
Siempre pagamos los mismos, y mientras tanto vemos como se despilfarra el dinero de manera obscena...
Un saludo,
el pobrecito hablador
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